Me dejaste con el silencio de la soledad y miles de palabras que para el amor que por ti sentía había para darte.
No me diste alternativa, hiciste tu propio juicio hacia mí, mi alegato no lo leiste, no dejaste que hiciera mi descargo, junto a tus amigos fueron juez y jurado y me sentenciaron a vivir en la espera de saber si lo nuestro pudo o no ser.~
No hay comentarios:
Publicar un comentario